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30 de junio de 1992



9 de junio de 1992:
El descubrimiento hacia la cura del cáncer sigue, he buscado muchas formas posibles, he mezclado distintos líquidos y tratamientos pero nada logra eliminarlo, ni siquiera frenarlo, incluso he hablado con mi compañero Julián pero nada,el tampoco lo consigue,y se cuanto se esfuerza por lograr mi mismo objetivo,el de todos, seguimos por donde empezamos, seguimos intentando hallar algo que no quiere ser encontrado.

10 de junio de 1992:
Nada

11 de junio de 1992:
No lo entiendo

13 de junio de 1992:
Hoy tampoco hemos logrado nada, rebuscando información he leído el intento fallido de William Osley ocurrido hace 10 años, intentó inyectar bacterias en tumores para estimular la inmunidad pero no lo logró y tras el fallo se rindió, ¿en eso acabaré yo?¿también me rendiré?, siento que no hay forma de lograrlo ,no ,lo sé, es un laberinto sin salida, cada vez que pienso hallar algo cada vez que pienso que es la salida doy más pasos y me doy cuenta que en realidad es otro camino sin ella.

15 de junio 1992:
Hoy he entrado en otra sala del laberinto,en otra sin salida.


17 de junio de 1992:
Nos han traído a un nuevo paciente con neoplasia maligna para trabajar con él, el anterior simplemente no lo logró, espero que este lo consiga.

19 de junio de 1992:
Nada

21 de junio de 1992:
Me toca hacer pruebas con el paciente, investigar su sangre y los cambios de ácido desoxirribonucleico.

24 de junio de 1992:
De nuevo en un callejón sin salida, ¿esto es todo lo que hay? ¿Por qué no puedo encontrar nada más? Esto es muy complicado no sé cuánto durare aquí, no soporto ver cómo llegan nuevos pacientes, se quedan un periodo de tiempo y se van, para siempre. No quiero ver cómo al nuevo le ocurrirá lo mismo, ella solo tiene 10 años.

25 de junio de 1992:
Hoy toca investigar al paciente más a fondo,intentar rebuscar en lo desconocido,intentar buscar algo que cambie todo,intentar poder lograr algo para poder salvar aquella vidas perdidas por culpa del cáncer,mis compañeros y yo nos uniremos para intentar ampliar la investigación e iniciar un nuevo proyecto,uno en el que pongamos nuestro mayor esfuerzo y demostrar al mundo que se puede alcanzar aquello que se anhela encontrar.

27 de junio de 1992:
Se ha ido,nos han traído a otro paciente

28 de junio 1992:
Me ha tocado un turno sola,daré mi mayor empeño y si no consigo nada mañana seguiré intentándolo hasta no poder más.

30 de junio de 1992:
Ayer encontré algo raro en la sangre del paciente, sus glóbulos blancos, se veían diferente, eran extraños no sé cómo explicarlo, también he hecho más pruebas con otros pacientes de mis compañeros, y la similitud es increíble, todos tienes los mismos síntomas aun siendo diferentes pacientes, lo he mandado a investigar más a fondo en un laboratorio más amplio y especializado, mañana llegan, ¡creo que por fin tengo algo!, lo presiento,no puedo esperar a comunicarlo con el mundo,no puedo esperar a ver la reacción que mostraran al ver que tendrán nuevas esperanzas y que yo soy quien lo ha logrado,el alcanzar un'paso más del laberinto,el resolver uno de sus miles de caminos,el girar la pared y ver que no es uno sin salida.






Eso fue lo último hallado de Laura Evans ,su rutina escrita en su diario, tras denunciar su desaparición, en su zona de trabajo solo se encontraron hojas tiradas por el suelo todo lo demás destrozado, hace 12 años que no se sabe nada de ella, no se sabe dónde está, que paso ni siquiera si sigue viva.
Se habló con sus pacientes, con sus compañeros de trabajo, pero no se logró conseguir ninguna información, fue difícil intentar encontrar a un culpable porque no habían pruebas suficientes, y por eso al que consideraron sospechoso lo soltaron con tan solo 6 meses de juzgados e, profundas investigaciones, pero no llevó a nada y tras 3 años el caso se dio como cerrado.





Julián dejo el periódico sobre la mesa, se dirigió a la cocina y vacío el café que estaba bebiéndose, una vez lavada la taza fue al baño, cerro la puerta se subió sobre el váter y alcanzó el techo, con dos golpes suaves abrió una baldosa sacó una caja envuelta en una bolsa, y agarró lo que esta contenía en ella, una hoja amarillenta, vieja, y algo rota, al bajar se miró al espejo , sonrió, al fin y al cabo nadie lo había descubierto, nadie lo había sospechado nadie la encontraría jamás, se dio un último vistazo en el espejo y salió del baño vacilante y orgulloso con la última hoja del diario de Evans.
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